-¿Oye, pero no tienes una simple foto?
En este mundo de smartphones y cosas así ya no se aprecian los sinceros gestos de amistad, como despertarse a las 5 de la mañana o ir en busca de mares irizados, o empaparse hasta la cintura solo para tener esos sutiles reflejos a contraluz. Son de esos momentos en la historia en los que tienes que pasar 10 años medio saliendo con una persona para que te presente a sus amigos o a sus papás o medio que sospeche que "te esta tomando afecto", la gente se ríe de mi por esa idea romántica de valentía o ingenuidad, lo de lanzarse a la incertidumbre por golpe de corazonada. Tenemos que probar las cosas 100 veces para sospechar que nos gustan.
Jimena Ramirez
Hoy hace un día especialmente frío en Hidalgo. Tengo esta sensación de reminiscencia indescifrable,
como si el pasado me hablara de afectos que no recuerdo , siento esta nostalgia que viene con el aire.
Es curioso que en el otro lado del mundo sea cumpleaños de Jimenita y aquí aún no.
Pues hoy escribo de ella porque es de estas personas que hacen que uno tenga ilusión en la vida, en la gente, en sus pensamientos y sus ojos.
Cada vez que la leo me busco y casi siempre me encuentro en sus palabras, tiene una manera dulce y franca de acomodar las almas y de hacernos sentir comprendidos y cómplices.
A menos a mi me ocurre así, así cuando veo sus ilustraciones tristes y cuando adivino que su tristeza siempre se transforma en una sonrisa que comparte.
Porque no importa cuanto nos demos cuenta que la gente cada vez menos sabe de confiar, que la voluntad de los sueños es temblorosa y frágil, que pocos llegan hasta el final de lo que deseaban.
No cuando leo a Jime en las noches y gracias a ella sonrío y recobro mi fe.
Y gracias a mi fe es que hago todas las cosas que me acercan cada vez más a lo que sueño.
Feliz cumpleaños Jimenita
Bess
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