Entonces ese pianista mostraba a su público como tocaba cuando era niño, tan lleno de impulsos que la melodía sonaba accidentada y torpe, cuando somos niños tocamos así, aún no sabemos controlar nuestra energía, conforme vamos avanzando en esta disciplina los impulsos se van volviendo unidad, la melodía se transforma, se vuelve cada vez más bella.
Como decía ese mantra " Dominaré con plena conciencia mi energía emocional"
Silvia me ha dicho que tengo un bonito don, puedo comunicar lo que siento acerca de lo que observo en el mundo, para generar la coincidencia, conocer a las personas en su forma más sensible.
Pero al mismo tiempo- me ha dicho- mi alma es joven, impulsiva , impaciente.
Asi que con frecuencia los mundos que creo se vuelvan caóticos.
Cuando esto ocurre me atemorizo, me decepciono y por lo general mi impulso me hace abandonar la empresa y buscar otro lugar.
Me cuesta poquito irme, voy dejando al futuro la responsabilidad de aportar sus conclusiones.Su justo equilibrio. El tiempo que todo lo purifica, como la lluvia que escampa.
Confío en mis decisiones, así que una vez que las tomo me es impensable regresar a cualquier punto anterior. Es como dice Eder, una vez que algo termina no puedes retomarlo desde donde se quedó porque eso implicaría partir de una fractura, y desde la fractura no se puede construir nada sólido.
Así me siento un poco, sé que algo ya terminó. Tengo hoy el corazón poquito triste y al mismo tiempo pienso en esto que me ha dicho Claus, y me hace feliz :
"Estoy aprendiendo algo bonito
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